Todos los sectores empresariales requieren de una buena gestión de mantenimiento para asegurar la gestión operativa de sus activos y espacios. Por tanto las empresas deben considerar la gestión de mantenimiento como una parte intrínseca de las estrategias empresariales. Asimismo, la gestión de mantenimiento tiene una variante conocida como GMAO, que significa Gestión del Mantenimiento Asistido por ordenador.
Por eso, en este artículo te estaremos comentando acerca de la gestión de mantenimiento y la importancia en el sector industrial.
Los tipos de mantenimiento industrial
Para mantener la productividad las máquinas, herramientas y procesos deben estar 100% funcionales. De lo contrario, las fallas se volverían cada vez más comunes y la producción se detendría. Por lo tanto, mantener la productividad y los equipos funcionales, es importante aplicarles cierto mantenimiento. Sin embargo, existen diversos tipos de mantenimiento, cada uno con sus puntos fuertes y débiles.
Los principales tipos de mantenimiento industrial son:
El mantenimiento predictivo
El mantenimiento predictivo hace un seguimiento del funcionamiento normal de un aparato o máquina. Así, lograr detectar posibles defectos antes de que supongan un problema mayor. Este tipo de mantenimiento utiliza la tecnología de monitorización del estado para medir el rendimiento de los equipos. Por ejemplo, unas mediciones generales de mantenimiento predictivo es la observación de los equipos. Esto es, el análisis del aceite y los sensores de uso de la energía.
Mantenimiento correctivo
El mantenimiento correctivo es cualquier acción que se dirige a un mal funcionamiento del sistema. Posteriormente, se soluciona para que el equipo pueda volver a funcionar correctamente. En contraste al mantenimiento reactivo, el mantenimiento correctico es una acción dirigida a un equipo concreto. Además, el defecto puede ser detectado o advertido antes de que provoque un problema importante o una avería total del equipo.
Mantenimiento reactivo
El mantenimiento reactivo es cualquier respuesta o reacción para arreglar una máquina averiada que necesita reparaciones. Si es posible, se centra en restablecer las condiciones normales de funcionamiento de los equipos averiados. Este proceso suele requerir los servicios de un mecánico, o la ayuda del fabricante, para reparar la maquinaria averiada, lo que puede ser bastante costoso en función de la urgencia y el alcance de la solicitud.
Mantenimiento sistemático
Este tipo de mantenimiento preventivo se distingue por su frecuencia. En otras palabras, se realiza de forma periódica y sistemática por los técnicos en intervalos de tiempo bien definidos. Así, nos permite sustituir regularmente los componentes y las piezas de recambio, mejorando la productividad de las máquinas. Por lo tanto, el mantenimiento preventivo sistemático se basa en la inspección periódica de los distintos equipos. De esta forma, los técnicos de mantenimiento pueden recopilar la información necesaria sobre los distintos componentes de la línea de producción. Por consiguiente, prevenir eficazmente las averías y los costes de reparación.
La gestión y administración
Antes de entrar en materia, es necesario aclarar algunos conceptos básicos. Por ejemplo, entre administrar y gestionar.
Entonces, se entiende por administrar como optimizar el uso de los recursos escasos. Esto, por medio de las tareas de:
- planificación,
- organización,
- ejecución.
Por otro lado, gestionar se basa en aplicar una serie de estrategias, herramientas y técnicas para optimizar el uso de los recursos. De tal forma, que se logre el funcionamiento eficiente de una organización y, paralelamente, su mejoramiento continuo.
Gestión de mantenimiento industrial
La gestión de mantenimiento consiste en mantener los recursos de la empresa con el fin de que la producción se lleve a cabo de forma efectiva. Así, se asegura evitar un derroche de dinero y recursos en el proceso de trabajo. Los objetivos de un jefe de mantenimiento son: controlar los costes, programar el trabajo de forma adecuada y eficiente, y asegurar que la empresa cumple con todas las normativas.
Como mencionamos, la gestión de mantenimiento es bastante importante para las empresas y el sector industrial. De hecho, es tan crucial que determina, parcialmente, el éxito a largo plazo de la empresa. Esto, porque unos recursos mal gestionados pueden detener las operaciones y hacer que la empresa pierda dinero.
Por lo tanto, la gestión del mantenimiento se asociada con la dirección y organización de diversos recursos para controlar la disponibilidad y el rendimiento de la unidad industrial a un nivel óptimo.
Así mismo, la gestión de mantenimiento ayuda a las empresas a mantener los recursos mientras que controlan el tiempo y los costes. De esta manera, garantizan la máxima eficiencia del proceso de fabricación y las instalaciones relacionadas. Por lo tanto, podemos afirmar que es una herramienta que ayuda a garantizar una calidad fiable y satisfactoria de la producción, la seguridad de los empleados y la protección del medio ambiente.
Importancia de la gestión de mantenimiento
Como mencionamos, el mantenimiento es una parte fundamental en el control de calidad y, en algunos casos, determina el éxito a largo plazo de una empresa. Por ejemplo, cuando se producen averías, el coste de la mano de obra por unidad aumenta hasta que las máquinas sean nuevamente reactivas y funcionen con normalidad. Sin embargo, antes de que las máquinas vuelvan a funcionar, habrá gastos inesperados para reparar los problemas. Esto incluye:
- costes adicionales para las instalaciones de reparación,
- técnico/equipo de reparación,
- inspecciones de mantenimiento preventivo,
- piezas de repuesto.
De hecho, el control de los costes de producción y presupuestos es una de las finalidades más importante de la gestión de mantenimiento. No obstante, no está completamente bajo el control del jefe de mantenimiento y, normalmente, trabaja con un presupuesto fijo establecido por la empresa. Por tanto, es necesario hallar la manera más adecuada de asignar el presupuesto a las distintas partes de los costes del departamento de mantenimiento.
También, la gestión de mantenimiento ayuda a mantener las máquinas condiciones óptimas de funcionamiento. Así, el mantenimiento de la planta es una función de servicio importante e inevitable de un sistema de producción eficiente.
Entonces, en caso de una mala gestión de mantenimiento se pueden producir problemas como:
- Los trabajadores pueden necesitar trabajo adicional debido a la escasez temporal de trabajo.
- Reprogramación de la producción.
- Necesidad de subcontratación de servicios.
- Desperdicio de materiales.
- Pérdida de producción.
- Necesidad de horas extraordinarias.